El coeficiente de utilidad es una herramienta clave en el cálculo de impuestos, pero en algunos casos puede generar resultados ilógicos, como valores infinitos o excesivos. Descubre por qué sucede y qué opciones tienes para evitar problemas fiscales.
El coeficiente de utilidad es clave para calcular impuestos en empresas, pero ¿qué pasa cuando da un resultado absurdo, como infinito o mayor al 100%? Aquí te explicamos cómo puede afectar tus pagos y qué hacer si te enfrentas a este problema.
¿Qué es el coeficiente de utilidad?
Es un indicador que se obtiene dividiendo la utilidad fiscal entre los ingresos nominales. Se usa para estimar los impuestos a pagar durante el año.
Pero en algunos casos, el cálculo puede dar números que no tienen lógica financiera, como:
- Coeficiente infinito: Ocurre cuando una empresa no tiene ingresos nominales, pero sí una utilidad fiscal por ajuste inflacionario. Como matemáticamente no se puede dividir entre cero, el coeficiente simplemente no existe.
- Coeficiente mayor al 100%: Si los ingresos nominales son muy bajos en comparación con la utilidad fiscal, el coeficiente puede dispararse a cifras imposibles, generando impuestos excesivos que no reflejan la realidad financiera.
¿Y qué puedes hacer?
🚨 Actualmente, la ley no ofrece una solución clara para estos casos. Si tu coeficiente de utilidad es irreal, es importante analizar alternativas y considerar un enfoque jurídico o contable que proteja los intereses de la empresa.
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