La tasa de retención de ISR sobre intereses se mantiene en 0.50% para 2025. Aunque la cifra no cambia, la inflación será clave para determinar su impacto en los saldos a favor. Descubre cómo esta medida podría influir en tus ahorros e inversiones
La retención del Impuesto Sobre la Renta (ISR) sobre intereses es el mecanismo mediante el cual las instituciones financieras, como bancos, retienen un porcentaje de los intereses generados por ahorros, inversiones u otros productos financieros que pagan rendimientos al contribuyente. Este sistema garantiza que el gobierno recaude de forma anticipada parte del impuesto correspondiente a dichos ingresos.
Dentro de la iniciativa de Ley de Ingresos para 2025, el Ejecutivo propuso conservar la tasa de retención sobre intereses en 0.50%, vigente desde 2024, según con un análisis de Fiscalia.
El Poder Legislativo aprobó esta medida al mantener el Artículo 21 de la Ley de Ingresos de la Federación (LIF) para 2025, confirmando la misma tasa de retención para el próximo ejercicio fiscal.
Aunque la tasa no cambia, Fiscalia señala que su impacto depende de la inflación registrada en 2025. Esto puede influir directamente en los saldos a favor generados por los contribuyentes.
Inflación alta vs. inflación baja
La relación entre inflación y retención queda reflejada en dos escenarios:
- Inflación alta: Los saldos a favor aumentan, ya que los rendimientos ajustados por inflación generan más diferencias fiscales.
- Inflación baja: La retención resulta más ajustada a los rendimientos reales, reduciendo los saldos a favor.
¿Un acierto?
Según Fiscalia, conservar la tasa de 0.50% es una decisión acertada del Ejecutivo y el Legislativo, ya que se proyectan condiciones económicas similares a las de 2024. Esto evitará cambios innecesarios y permitirá una gestión fiscal más predecible para los contribuyentes con ingresos por intereses.
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