Buen Fin sin remordimientos: Consejos para gastar inteligentemente
Con el Buen Fin arrancando, los descuentos y promociones están en todas partes. Pero antes de dejarnos llevar, aquí tienes algunos consejos clave para cuidar tu bolsillo, aprovechar buenas ofertas y evitar deudas innecesarias
Con el Buen Fin arrancando, la publicidad de promociones y descuentos está por todas partes para tentarnos a comprar productos o servicios. Sin embargo, es fundamental pensar en nuestra situación financiera y planear cómo afrontaremos los próximos meses según nuestra realidad económica.
Aquí algunos consejos para que tu cartera no sufra tanto en esta temporada de ofertas:
1. Define si es una necesidad o un gusto: Antes de lanzarte a comprar, pregúntate si lo que deseas adquirir es verdaderamente necesario o simplemente un “gustito”. Esto ayuda a establecer prioridades. No es lo mismo aprovechar un buen descuento en el pago de colegiaturas o en un plan de previsión funerario —que sí representa un ahorro real— que financiar una televisión en 12 meses sin intereses que quizás no necesitas.
2. Verifica si es un beneficio real o solo pago diferido: Algunos descuentos ofrecen ventajas si pagas por adelantado, mientras que los meses sin intereses solo posponen el pago. Si decides usar pagos diferidos, hazlo con precaución para evitar acumular compromisos que podrían limitar tu capacidad de endeudamiento para futuros gastos.
3. Monitorea precios antes y durante el Buen Fin: En ocasiones, algunos vendedores aumentan sus precios previos al Buen Fin y luego aplican “descuentos” sobre estos. Para evitar esto, recuerda que la PROFECO está ahí para proteger a los consumidores y denunciar prácticas desleales.
4. Conoce tus finanzas mensuales: Ten presentes tus gastos habituales y calcula cuánto “extra” puedes gastar sin desequilibrar tu presupuesto. Además, tener un fondo de contingencia puede ser un salvavidas ante imprevistos, por lo que evitar deudas al límite es clave para una salud financiera sólida.
5. Establece un presupuesto: Aunque a veces cuesta, tener un presupuesto claro es una excelente idea. Así, tendrás control sobre tus gastos diarios, tus ahorros, tu fondo de emergencia y el dinero disponible para darte algún gusto.
Te invito a hacer compras inteligentes que no afecten tu situación financiera en el futuro. Comprar sin una planificación puede llevarte a problemas de liquidez o a contraer deudas difíciles de pagar.
El autor de este artículo, M.F. y L.C.P.C. Eduardo Estrada Borja, es integrante de la Comisión Técnica Fiscal del Colegio de Contadores Públicos de México
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