El SAT bloquea cuentas y luego exige pago de impuestos
El fisco comienza con el congelamiento de cuentas bancarias de los contribuyentes y luego les exige el pago de impuestos
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha adoptado un programa de fiscalización que incluye medidas de presión para aumentar la recaudación de impuestos, según dijo Adolfo Solís Farías a Reforma, socio del despacho legal Farías Abogados.
Como parte de este programa, el SAT comienza con el congelamiento de cuentas bancarias de los contribuyentes y luego les exige el pago de impuestos. Solís Farías señala la ironía de esta estrategia, ya que bloquean las cuentas antes de solicitar el pago, una táctica que, según él, es única en México y no se encuentra en otros países de América Latina.
Este programa incluye amenazas de cárcel tanto para los contribuyentes como para sus familiares, así como actos ilícitos y de confusión. También contempla la cancelación de certificados de sellos digitales, firma electrónica y Registro Federal de Contribuyentes (RFC).
El programa ha permitido al SAT aumentar la recaudación de impuestos desde 2019, y ahora buscan duplicar la recaudación en 2024, superando lo que lograron en un sexenio los ex presidentes Vicente Fox y Felipe Calderón.
Este programa se enfocará inicialmente en un grupo de 12,800 contribuyentes que aportan el 49% de la recaudación, y luego se dirigirá hacia cerca de 3.6 millones de contribuyentes que contribuyen con el 22% de los ingresos tributarios.
Juan Carlos Jiménez Labora Mateos, socio industrial del despacho Sánchez Devanny, expuso que las empresas de comercio exterior con certificación para recuperar el IVA y el IEPS han experimentado un mayor escrutinio del SAT en los últimos meses, con un aumento significativo en las visitas de supervisión y la cancelación del 75% de las certificaciones.
En cuanto a la cancelación de sellos digitales, Solís Farías explica que esta acción se introdujo en 2019 en el Código Fiscal de la Federación para combatir deducciones a través de empresas “fantasma” o “factureros”. Anteriormente, se requería una determinación preliminar para proceder a la cancelación de sellos digitales.
Otros mecanismos de presión incluyen la cancelación del RFC o la Firma Electrónica (e.firma) para personas de entre 55 y 70 años de edad cuando cambian de actividad y la autoridad considera que es inconsistente con la que antes desempeñaban.
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