La disminución de la jornada laboral en México a 40 horas semanales traerá consigo desafíos económicos significativos para las empresas, señalan especialistas
Especialistas en recursos humanos estiman un aumento de hasta un 30% en los costos laborales para las empresas mexicanas si se reduce la jornada laboral de 48 a 40 horas a la semana. Esta medida, que se espera sea aprobada en el actual periodo de sesiones, generará desafíos significativos para las compañías.
Jesús Herrera, responsable de Relaciones Laborales de Grupo Deacero, dijo a Reforma que las empresas deberán encontrar soluciones creativas para enfrentar este incremento de costos, que se suman a los cambios recientes en materia laboral que ya están impactando a las organizaciones.
La reducción de la jornada laboral se suma a la reciente reforma que aumentó los días de vacaciones de los trabajadores, lo que significa un día adicional de descanso semanal que deberá ser cubierto por las empresas. Herrera comentó al medio: “Sí es cierto que vamos a tener más ausencias, los costos se van a incrementar en la nómina, por ahí hemos hablado de análisis que arrojan nos puede impactar entre 20 o 25 por ciento y habrá casos en los que hasta 30 por ciento”.
Reforma reportó que como resultado de los cambios laborales anteriores, que incluyeron aumentos en los salarios mínimos, días de vacaciones y aportaciones patronales para el fondo de retiro, cada empleado cuesta hasta un 20% más para las empresas en Nuevo León en comparación con el año anterior.
Fidel Antuña, gerente de Relaciones Laborales de Cydsa, señaló al mismo medio que existe un límite legal de 9 horas extras por trabajador, lo que limita la capacidad de las empresas para cubrir la demanda adicional de trabajo resultante de la reducción de la jornada laboral.
Además, se están preparando otras reformas laborales que presionarán aún más los costos empresariales, como el aumento propuesto del aguinaldo de 15 a 30 días de salario y las medidas relacionadas con la contratación de adultos mayores. Estas reformas anticipan años difíciles para muchas empresas.
A pesar de los desafíos económicos que plantea la reducción de la jornada laboral, algunos expertos ven un efecto positivo en la productividad al reducir el estrés laboral. David Puente, socio del Área Laboral del despacho Basham, Ringgle y Correa, destacó la importancia de proteger la salud mental de los trabajadores en un contexto de alto estrés laboral.
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