La transición hacia vapeadores y la falta de regulación están contribuyendo a esta disminución en los ingresos fiscales
La recaudación por el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) relacionado al tabaco en México se ha visto afectada debido al aumento de precios, la implementación de la Ley Antitabaco y la prohibición de vapeadores.
La recaudación para el primer semestre de este año fue casi 2,000 millones de pesos menos de lo esperado. La transición hacia vapeadores y la falta de regulación están contribuyendo a esta disminución en los ingresos fiscales, según reporta Expansión.
En un giro sorprendente, la recaudación por el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) derivado del tabaco en México está disminuyendo, enfrentando un impacto directo por la subida de precios, la implementación de la Ley Antitabaco y la prohibición de vapeadores.
La recaudación del primer semestre de este año se quedó casi 2,000 millones de pesos por debajo de la expectativa de 27,397 millones. Esto marca un cambio respecto al año pasado, donde la recaudación superó las previsiones en 220 millones, y en 2021, por 803 millones, según datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
A pesar de que el tabaco se considera un producto inelástico, es decir, la demanda no debería variar significativamente ante cambios de precio, la inflación reciente ha erosionado el consumo. Además, las nuevas restricciones, como la Ley Antitabaco, han reducido los espacios para fumar y promovido la conciencia sobre los riesgos del tabaquismo en la sociedad.
José Luis Clavelina, director de Investigación del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), dijo que la disminución también podría estar relacionada con la creciente adopción de vapeadores, a pesar de su prohibición y la falta de información oficial sobre sus implicaciones para la salud y su tratamiento fiscal.
A partir del 15 de enero de 2023, entraron en vigencia en México modificaciones al Reglamento de la Ley General para el Control del Tabaco, imponiendo prohibiciones de publicidad, promoción y patrocinio del tabaco en todos los medios de comunicación, así como su exhibición en puntos de venta. Además, se amplió la restricción de su consumo en espacios públicos como plazas, parques, playas, estadios, transporte público y escuelas en todos los niveles.
Esta tendencia a la baja en la recaudación del IEPS se ve acentuada por el auge de vapeadores. Aunque son ilegales, hay una creciente preferencia por los vapeadores debido a la percepción de ser menos dañinos. Sin embargo, existe una falta de información sobre su seguridad y sus obligaciones tributarias. Según una encuesta de la Comisión Nacional contra las Adicciones de 2022, casi un millón de mexicanos entre 12 y 65 años utilizan vapeadores, y 5 millones los han probado en algún momento. A pesar de las alertas de la Cofepris sobre los riesgos para la salud, estos dispositivos aún son accesibles en diversos puntos de venta, incluyendo tiendas de conveniencia.
José Luis Clavelina advierte sobre los problemas futuros que esta tendencia puede desencadenar en el sistema de salud pública, ya que quienes optan por los vapeadores podrían enfrentar problemas de salud a largo plazo relacionados con el consumo de sustancias tóxicas.
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