El aumento fue posible gracias a los ajustes en la tasa del ISN implementados por siete estados, señala la calificadora Moody’s
Moody’s México señala que el promedio de ingresos propios de 16 estados del país se elevó de 15.5 por ciento a 19.2 por ciento de 2020 a 2022. Este incremento es resultado de un aumento en la tasa del Impuesto Sobre Nómina (ISN) y la recuperación del mercado laboral, lo que impacta positivamente en sus perfiles crediticios.
La calificadora destaca que este aumento en los ingresos propios es positivo desde el punto de vista crediticio, ya que los estados tienen una mayor capacidad para financiar sus gastos operativos y de capital. Además, las mayores entradas reducen la exposición de los estados ante choques en las transferencias federales y les brindan flexibilidad en caso de rezagos temporales en la recepción de dichas transferencias.
Moody’s explica que este incremento fue posible gracias a los ajustes en la tasa del ISN implementados por siete estados: Jalisco, Querétaro, Hidalgo, Nayarit, Yucatán, Guanajuato y Sonora. Estas medidas fiscales, junto con la recuperación del mercado laboral posterior a la pandemia, impulsaron una tasa media anual de crecimiento del ISN del 16.4 por ciento entre 2020 y 2022.
Derivado de la pandemia de Covid-19, el empleo se vio afectado de manera importante, lo cual tuvo un impacto negativo en la recaudación del ISN de los estados calificados. Sin embargo, al cierre de 2022, el número de empleos formales registrados ante el IMSS en las entidades calificadas aumentó en un 8.9 por ciento en comparación con el cierre de 2020, alcanzando un total de 11.5 millones.
Moody’s también destaca que algunas entidades han tomado medidas en otros impuestos, como la introducción de impuestos ecológicos y la aplicación del impuesto sobre el hospedaje a los servicios ofrecidos en plataformas digitales.
El ISN representa, en promedio, el 43 por ciento de los ingresos propios de las entidades, siendo uno de los componentes más importantes.
Para los años 2023 y 2024, Moody’s proyecta que la recaudación del ISN seguirá fortaleciéndose debido a las condiciones favorables del mercado laboral en algunos estados, especialmente aquellos beneficiados por el nearshoring. Sin embargo, se espera que no se modifique significativamente debido a las limitaciones en el marco fiscal estatal.
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