Desde que entró en vigor el nuevo esquema de facturación, se advirtieron algunas complicaciones relacionadas con nuevos requisitos para la emisión del CFDI 4.0.

Un estudio realizado por la Cámara Nacional de la Industria de Software (Canisoft) revela que 4.5 millones de empresas en México son micro pequeñas y medianas empresas (mipymes) y de ellas casi 4 millones siguen sin adoptar la nueva facturación electrónica 4.0.

Cerca del 90 por ciento de las mipymes mexicanas está en riesgo de perder la factibilidad de emitir facturas a partir de abril del 2023, alertó Arístides Palma, presidente de la Canisfoft, en entrevista con Reforma.

“Ya va a ser obligatorio el esquema de facturación con Comprobantes Fiscales Digitales por Internet (CFDI) en su versión 4.0, por lo que las empresas que aún no lo adoptan dejarían de cobrar o de realizar sus ventas al estar impedidas para poder facturar”, explicó Palma.

Asimismo, dijo que es un reto muy importante tanto operativo como de capacitación de personal que opera los sistemas de facturación de los negocios, pues implica recopilación de manera puntual de datos de sus clientes, como el Código Postal, y de sus empleados para empezar a timbrar los recibos de nómina de éstos, que ahora será un nuevo requisito en los CFDI’s versión 4.0.

Complicaciones para mipymes

Como reportamos en El Contribuyente, desde que entró en vigor la versión 4.0, se advirtieron algunas complicaciones relacionadas con nuevos requisitos para la emisión del CFDI 4.0.

Se trata de la validación de algunos datos del receptor, que deben coincidir al 100% con la información plasmada en el Registro Federal de Contribuyentes (RFC).

“El 90 por ciento de las mipymes seguían hasta hace tres meses con la facturación a través del CFDI 3.3 y sin tomar la previsión de sumarse a la facturación 4.0 porque son decenas de millones diarios de facturas, lo que colapsará al sistema de facturación nacional”, advirtió el especialista.

Asimismo recomendó  a las empresas que inicien la operación del nuevo sistema de facturación cuanto antes y que no vayan a hacerlo hasta enero, porque dejarían de estar en posibilidad de facturar.

Como reportamos, la obligatoriedad de la nueva versión implicará mayores problemas para las micro, pequeñas y medianas empresas, advirtió Mario Morales, socio de Impuestos de la firma BMTC-DFK.

Además, dijo que una problemática es el desconocimiento de las mipymes, que por lo general se centran más en temas operativos y dejan de lado los temas administrativos.

Por otro lado, la firma Hooman, explicó a IDC online que, por la falta de un área especializada en nóminas o la asesoría de un especialistas en materia fiscal, más de 225,000 pequeñas y medianas empresas que operan en el país podrían enfrentar problemas para cumplir con el proceso de facturación con la versión 4.0 del CFDI.