El precierre permite prever el resultado fiscal del año y, en su caso, el flujo de efectivo para el pago del Impuesto sobre la Renta en el ejercicio siguiente
Faltan algunas semanas para que termine el año, así que queda muy poco tiempo para tomar acciones y decisiones que modifiquen el rumbo de la empresa y los números de la declaración anual.
Por eso, el “precierre” contable y fiscal es indispensable como una práctica recurrente en los negocios.
El “precierre” sirve para que los contribuyentes se anticipen a la identificación de aspectos que pudieran tener un impacto positivo o negativo en las finanzas de las empresas, de acuerdo con el especialista Alejandro Bolaños Pérez.
En el artículo, el contador expone los aspectos que se deben considerar en el “precierre”, y se indica que la definición de las actividades a realizar depende de las características de la empresa.
En su artículo publicado en Soy Conta, considera que que el ejercicio del “precierre” siempre deja buenos resultados, porque se pueden identificar aspectos que, por alguna razón durante el ejercicio, no fueron observados.
Además, señaló que con el “precierre” se tiene un periodo dentro del mismo año que permite lo siguiente:
- Corregir lo que corresponda, en aspectos contables, fiscales, legales, de operación, etcétera.
- Prever el resultado fiscal del año y, en su caso, el flujo de efectivo para el pago del Impuesto sobre la Renta (ISR) en el ejercicio siguiente.
- Identificar oportunidades o riesgos, así como realizar una adecuada planeación fiscal para el cierre.
- Aportar elementos para la toma de decisiones.
- Ubicar áreas de mejora para los procesos internos, entre otros beneficios.
Bolaños Pérez considera que el periodo de enero-septiembre es el ideal para este ejercicio, porque permite a los contribuyentes contar con tres meses restantes para realizar las tareas o adecuaciones necesarias. Pero señala cualquier periodo posterior al señalado, será igualmente útil para implementarlas.
– Con información de Soy Conta.