En el Corredor se planean construir 10 parques industriales con una extensión de 380 hectáreas cada uno, los cuales se encontrarán bajo el control de la Secretaría de Marina
Para atraer inversiones privadas en el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT), Oaxaca, el gobierno federal otorgará incentivos fiscales, que contemplan la disminución del Impuesto Sobre la Renta (ISR) e Impuesto sobre Valor Agregado (IVA).
El megaproyecto de Andrés Manuel López Obrador contempla 10 parques industriales en los 300 kilómetros que abarca el tramo desde Salina Cruz, Oaxaca, hasta Coatzacoalcos, Veracruz.
La Concamin informó que sectores como el automotriz (autopartes, equipo de transporte), agroindustria (alimentos, bebidas y Tabaco), construcción y vivienda, turismo, manufactura (cuero, textil, vestido), minería, además de transporte y logística, energía entre otros tienen interés de invertir en el desarrollo industrial.
Incentivos fiscales
De acuerdo con declaraciones del mandatario, cada parque industrial va a contar con una superficie, en promedio, de 380 hectáreas y se utilizarán para la instalación de “empresas ensambladoras y de otro tipo”, mismas que se encontrarán bajo el control de la Secretaría de Marina (Semar).
“El secretario de Hacienda ya dio a conocer cuáles serían los estímulos fiscales para quienes se instalen es estos parques. Se trata de una reducción considerable del ISR, igual como lo estamos haciendo en la frontera norte y sur. También incluye una reducción del IVA, predial e incluye otro tipo de apoyos. Van a contar con gas y energía eléctrica”, afirmó el presidente en la conferencia del 21 de diciembre de 2021.
Rafael Marín Mollinedo, director general de la autoridad del Corredor Interoceánico, dijo recientemente que será en septiembre de este año cuando se de a conocer el decreto de incentivos fiscales y a partir de ahí comience la “lluvia de inversiones” privadas para uno de los proyectos logísticos del sexenio.
En conferencia con la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), Marín detalló que para atraer la inversión se harán reducciones importantes en el ISR, IVA, el Impuesto Sobre la Nómina, impuestos al comercio exterior, y que habrá “otro tipo de incentivos”.
Indicó que en noviembre de este año a más tardar el Corredor ya debe iniciar operaciones con el cruce interoceánico de contenedores y del tren, mientras que se espera que en septiembre se emita un decreto sobre incentivos fiscales en los parques para que entre en la miscelánea fiscal del próximo año y arranquen con el paquete fiscal de 2023.
Sobre el gasoducto
Asimismo, el representante del proyecto logístico informó que la Semar será la autoridad encargada de licitar las obras públicas del ferrocarril, mientras que con el arranque de los parques industriales se espera que se encuentre listo el ducto de gas que construye Comisión Federal de Electricidad (CFE) para la operación de las empresas.
El gasoducto medirá 36 pulgadas de diámetro y 270 kilómetros de longitud y pretende cruzar la estrecha franja del Istmo de Tehuantepec. Esta obra es impulsada por la CFE para satisfacer las necesidades de gas natural a empresas del sur del país, y sobre todo de las que se establezcan en los parques industriales que promueve el CIIT.
El objetivo del gasoducto es alimentar a la industria que se pretende atraer del megaproyecto del Corredor Interoceánico y exportar gas a Asia, “pues los precios son muy atractivos y va a ser un buen negocio”, de acuerdo con AMLO.
Carlos Beas Torres, asesor de la Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo (Ucizoni), advirtió que sin permiso de las comunidades ayuujk, trabajadores de la compañía Temura, contratada por la CFE, ingresan a las parcelas ejidales y colocan señalamientos con las coordenadas por donde, suponen los campesinos, pasará el gasoducto que se construirá desde Chinameca, Veracruz, hasta Salina Cruz, Oaxaca.
En Puente Madera, agencia del municipio San Blas Atempa, Oaxaca, el pueblo se opone a la construcción en sus tierras comunales de uno de los 10 parques industriales proyectados para acompañar la llegada de la industria y el comercio internacional a la región, porque no están de acuerdo con la extracción de recursos naturales y la devastación de la zona que provocará.