Algunos contribuyentes se han enfrentado a complicaciones para tramitar y corregir su Constancia de Situación Fiscal.
El lunes pasado, Reforma reportó sobre la dificultad de timbrar facturas electrónicas en la versión 4.0 y las complicaciones de los trabajadores, quienes deben tramitar su Constancia de Situación Fiscal antes del 1 de julio.
En la factura versión 4.0 se exigen como requisitos los nombres del emisor y del receptor. Pero los nombres deben registrarse tal y como se encuentra en la Cédula de Identificación Fiscal y Constancia de Situación Fiscal, respetando números, espacios y signos de puntuación.
Situación caótica
De acuerdo con medios locales, en Monterrey cientos de contribuyentes están atiborrando las oficinas del Servicio de Administración Tributaria (SAT) para obtener su Cédula de Identificación Fiscal, su firma electrónica (e-firma) o una contraseña.
En las largas filas, Reforma informó de contribuyentes con desconocimiento sobre los trámites, por ejemplo, una persona extranjera que tenía cita cuando sólo iba por información de cómo tramitar su Registro Federal de Contribuyentes (RFC) y dos jóvenes que acudieron a tramitarlo luego de haber esperado mes y medio para obtener la cita.
Alfredo Esquivel Boeta, de la Comisión Fiscal Nacional del Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP), calificó como un “viacrucis” para las empresas la exigencia del Certificado de Situación Fiscal.
“Los trabajadores personalmente son los que tienen que ir a corregir su situación fiscal del domicilio, esto conlleva que el por el poco conocimiento que tienen de las cuestiones fiscales no sepan lo que requieren hacer”, dijo al diario.
Mayor fiscalización
Con esta nueva versión del Comprobante Fiscal Digital por Internet (CFDI) 4.0 se busca tener una mayor fiscalización de los contribuyentes, de acuerdo con el contador Guillermo Mendieta, integrante de la comisión técnica de Auditoria Fiscal del Colegio de Contadores Públicos.
Además, dijo que, de no corregirse esta situación, podría haber inconsistencia en los CFDIs con los registros y controles del SAT, propiciando que no se puedan timbrar para cumplir con la emisión y pago del Impuesto Sobre la Renta (ISR) retenido por el patrón.
A principios de mes, reportamos que Roberto Colín Mosqueda, integrante de la Comisión Fiscal 2 del Colegio de Contadores Públicos de México (CCPM), explicó que sería preferible que se concediera hasta el primero de enero de 2023 para la obligatoriedad de la nueva versión, con el fin de que los contribuyentes puedan familiarizarse suficientemente con ella.