En el SAT hay un rezago de tres semanas y hasta un mes para realizar trámites sencillos como las inscripciones al RFC.
Una encuesta realizada por la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) arrojó que el 87% de los contribuyentes ha tenido dificultades para obtener citas en el Servicio de Administración Tributaria (SAT), el 65% ha tardado más de 30 días para obtenerla y, una vez obtenida, el 78% señaló que la cita la tiene un mes después de haberla registrado.
El fisco habilitó el portal CitaSAT por medio de la página citas.sat.gob.mx, en la que los contribuyentes pueden agendar un espacio para trámites fiscales, sin embargo, al no haber disponibilidad inmediata, coloca a la persona en una fila virtual, para que, al momento de haber un espacio, este sea agendado de manera automática.
“Ayuda porque hay un orden y no te tienes que estar al pendiente todo el tiempo, como el año pasado, donde tenías que estar ahí de planta para ver que se desocupara un espacio”, dijo Sergio Flores Robles, integrante de la Comisión Fiscal 2.0 del Colegio de Contadores de Jalisco, en entrevista con Reforma.
De acuerdo con el medio, hay un rezago de tres semanas y hasta un mes para realizar trámites sencillos como las inscripciones al Registro Federal de Contribuyentes (RFC).
También existe atraso de uno a tres meses para trámites más importantes, como dar de baja o liquidar a alguna empresa, al igual que algún trámite de reestructuración, movimientos que urgen a las empresas para cumplir con sus obligaciones fiscales.
Algunos trámites pueden realizarse en línea, por ejemplo, la generación de contraseña, renovación de e.Firma (en caso de no haber caducado más de un año) y la obtención de la constancia de situación fiscal; lo anterior mediante el aplicativo SAT ID (https://satid.sat.gob.mx/).
Otra opción que tienen los contribuyentes es ingresar una aclaración, orientación, solicitud o queja en “Mi Portal”, con su RFC y contraseña.
O bien, pueden presentar una queja ante la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon) a efecto de lograr una comunicación directa con el SAT; o en últimas instancias, el presentar un amparo ante la imposibilidad de cumplir con sus obligaciones fiscales.
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