Para crear un plan de recuperación es importante reconocer las vulnerabilidades de los negocios que expuso la pandemia.
Luego de más de un año de pandemia, las Pymes mexicanas reconocen oportunidades de recuperación en factores como el avance del plan nacional de vacunación y la paulatina reapertura de actividades y negocios.
No obstante, para avanzar sobre esta meta es importante reconocer que el consumidor ha cambiado y para conquistarlo nuevamente también necesitarán adaptarse a un entorno digitalizado, además de resolver los problemas a los que siempre han estado expuestas, entre ellos, el limitado acceso al financiamiento.
Comercio electrónico como oportunidad de crecimiento
Las medidas de confinamiento orillaron a millones de mexicanos a optar por las compras en línea y constatar sus beneficios. De acuerdo con la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO), en 2020, el crecimiento del comercio electrónico fue del 81 por ciento, representando 316 mil millones de pesos en ventas.
En contraste, la “Encuesta sobre el impacto económico generado por Covid-19” del Inegi, señala que las principales medidas de digitalización de los dueños del 49.1 por ciento de las microempresas y 46.1 de las Pymes, únicamente consistieron en la apertura de canales de venta a través de Whatsapp, Facebook e incluso páginas en línea, siendo su principal temor en este rubro la competencia contra las grandes marcas.
Esta incursión en el comercio electrónico representa por igual nuevas oportunidades que grandes retos para los emprendedores. Ya que su crecimiento depende proporcionalmente del control que tomen sobre un ecosistema en el que no habían incursionado hasta ahora, capacitaciones para implementar estrategias de venta eficientes, adquirir herramientas de gestión empresarial para cuantificar su productividad y tomar decisiones para incrementarla.
Inclusión financiera en tiempos de pandemia
Sin embargo, para pensar en una estrategia de fortalecimiento, promoción de su oferta de valor y diferenciación contra la competencia, el emprendedor se topa con uno de los problemas más serios que agudizó la pandemia: el difícil acceso al crédito bancario.
No es ningún secreto que solicitar un crédito empresarial en un banco tradicional es un proceso complejo para las Pymes. De hecho, solo 3 de cada 10 logra acceder a uno.
Aunado a esto, desde agosto de 2020, se ha registrado una constante caída en la aprobación del crédito bancario por parte del sector privado, de acuerdo con los Agregados monetarios y actividad financiera del Banco de México (Banxico).
La buena noticia es que las herramientas digitales continúan del lado de los emprendedores, ya que las empresas de tecnología financiera o “fintechs” ofrecen opciones de financiamiento en línea y con menos requisitos, en comparación con las opciones tradicionales.
Una de las Fintech más longevas en México es Konfío, que en su página ofrece créditos para emprendedores mediante procesos transparentes e intuitivos, así como herramientas de gestión empresarial accesibles, desde 299 pesos al mes, que son fáciles de adoptar, para lograr una transición orgánica y sencilla hacia la digitalización.
Aunque la recuperación económica en México comienza a ser una realidad, las Pymes no pueden dejar de lado que el consumidor ha cambiado por completo y requiere volver a conquistarlo, para garantizar su permanencia en un ecosistema en el que lo único constante es el cambio.