Conoce algunos aspectos y medidas que deben tomar en cuenta las pymes, para evitar riesgos derivados de la reforma al outsourcing.
El viernes 23 de abril, se publicó la reforma al outsourcing o subcontratación laboral.
Con la reforma se prohíbe la subcontratación de personal, pero se permite la subcontratación de “servicios especializados o de ejecución de obras especializados”. [Ley Federal del Trabajo (LFT) 13].
Requisitos de las empresas de servicios especializados
Esto se permite si se cumplen, entre otros, los siguientes requisitos:
- Las actividades no deben formar parte del objeto social o la actividad preponderante del beneficiario del servicio.
- El contratista debe estar en el padrón o registro de prestadoras de servicios especializados u obras especializadas (REPSE).
Por esa razón, las pequeñas y medianas empresas (pymes) deben ser más precavidas al momento de contratar los servicios especializados, como limpieza o seguridad. Porque las sanciones son altas en caso de incumplimiento. Esto lo dijo el presidente de la Comisión Laboral de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Armando Guajardo, en entrevista con Milenio.
Medidas para evitar riesgos derivados de la reforma al outsourcing
De acuerdo con una nota publicada por el diario, el especialista dijo que las pymes deben tomar en cuenta los siguientes aspectos y medidas, para evitar riesgos derivados de la reforma al outsourcing:
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Deben definir cuáles son sus objetos sociales, basados en lo que realmente hacen o venden.
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Si han usado la subcontratación y van a traer a ese personal a sus empresas, deben prepararse para llevar a cabo la sustitución patronal.
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Se debe tener claridad sobre los empleados que serán sujetos de ser transferidos de esquema laboral.
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Respecto a sus trabajadores, deben estar al día con sus obligaciones fiscales y de seguridad social.
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Tienen que contar con la opinión de cumplimiento del Servicio de Administración Tributaria (SAT).
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Se deben revisar todos los servicios que actualmente contratan, tanto proveedores como clientes, para analizar si efectivamente caen dentro de las empresas que proporcionan ahora los servicios especializados.
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Tener mucha atención con qué políticas y procedimientos para contratación y administración van a tener.
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Verificar que sus proveedores no se encuentren en la lista de las empresas facturadoras de operaciones simuladas.
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Analizar que los proveedores que tengan cuenten con activos, infraestructura, personal y capacidad económica para afrontar los trabajos y obligaciones fiscales.
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Verificar permanentemente que las empresas con las que tengan relaciones cumplan con sus obligaciones fiscales con sus trabajadores.
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Realizar un análisis para investigar los posibles riesgos con los proveedores actuales de servicios que estas tengan.
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Diferenciar cuándo se trata de contratos mercantiles o contratos de servicios de personal especializado.
Con información de Milenio.
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