La jefa SAT plantea una reforma fiscal sin subir impuestos, como la pidió AMLO
Raquel Buenrostro dijo que la próxima reforma fiscal se enfocaría en facilitar el cumplimiento de las obligaciones fiscales.
La jefa del Servicio de Administración Tributaria (SAT), Raquel Buenrostro, reveló que recibió la instrucción del presidente, Andrés Manuel López Obrador, de empezar a trabajar en una nueva reforma fiscal.
Sin embargo, adelantó que ésta no consistirá en aumentar los impuestos, sino en facilitar el cumplimiento de las obligaciones fiscales.
“El presidente nos ha dado instrucciones de ir preparando la reforma fiscal. Una reforma fiscal no necesariamente está relacionada con nuevos impuestos ni con incremento de tarifas. La reforma fiscal que se está revisando tiene que ver con la simplificación administrativa, tiene que ver de qué manera las personas cumplen con sus obligaciones fiscales tanto físicas, morales, sobre todo las pequeñas y las medianas. Cómo les facilitamos la obligación y su deber cívico de contribuir”.
La funcionaria, en conferencia en la Cámara de Diputados, a la cual también asistió el secretario de Hacienda y Crédito Público, Arturo Herrera, adelantó que también se planea introducir algunas modificaciones a la ley para fortalecer el combate al contrabando de combustibles y el huachicol.
Buenrostro reveló que los ingresos tributarios del primer trimestre de este año se encuentran ligeramente por debajo del periodo análogo del año pasado. La razón de esto, dijo, se debe a lo recaudado del comercio exterior.
“La parte de comercio exterior, hasta el día de ayer, sobre todo IEPS, sobre todo combustibles, relacionado con toda la parte automotriz, 23 mil millones ya de pesos menos que el año pasado, y eso se deriva no sólo del contrabando, sino del huachicol, que es el gran problema para México este año”.
Buenrostro relató que en 2020 detectaron un modus operando, en el que los huachicoleros robaban en el Golfo de México para luego sacar la mercancía a mar abierto y volverla a meter al país con pedimentos de importación falsos. Aseguraban haberlo comprado en mar abierto a empresas internacionales, amparando la supuesta transacción con facturas falsas.
“Entonces se lo robaban de un lado, lo sacaban a mar abierto y lo volvían a meter. y cuando lo metían, como era robado sí les convenía pagar impuestos, pero ahora ni siquiera los pagan, los de importación. Entonces sí tenemos un hoyo muy grande, ese es el gran reto. y es un reto interinstitucional, porque de ahí está participando también la Secretaría de marina, la Secretaría de Defensa”, concluyó.
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