Mejorar la fiscalización en lugar de desaparecer outsourcing : AMECH
Para el presidente de la Asociación Mexicana de Empresas de Capital Humano, el gobierno debería actuar en forma de pinza: simultáneamente fortalecer la regulación al outsourcing e incrementar la fiscalización.
En la conferencia mañanera del día de ayer, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que el gobierno que él encabeza está considerando la posibilidad de eliminar la figura del outsourcing, pues ya habían intentado regularlo, sin éxito. El presidente dejó abierta la posibilidad de implementar regulaciones adicionales sin desaparecer la figura “eso es lo que vamos a ver, porque no queremos que salga una reforma que puedan burlar de nuevo”.
En entrevista con diario La Razón, Armando Leñero, presidente del Centro de Estudios para el Empleo Formal (CEEF), explicó que uno de los mayores riesgos de la propuesta es que quienes actualmente trabajan bajo la modalidad del outsourcing podrían terminar en la economía informal.
De acuerdo con Leñero, más de 4.5 millones de trabajadores en México están contratados por esquemas de outsourcing. Según él, si se elimina la figura, 80% de ellos; es decir, 3.6 millones, pasarían a la informalidad. Así, la informalidad pasaría de una tasa de 54.9% a 61% de la población activa.
En entrevista con El Contribuyente, Pablo Lezama, presidente de la Asociación Mexicana de Empresas de Capital Humano (AMECH) se pronunció a favor de regular a las empresas que usan el outsourcing de forma ilegal, pero reconoció como un error la tentativa de desaparecerlo.
“Habría consecuencias terribles. Tenemos alrededor de 4.3 millones de trabajadores en outsourcing lega o ilegal. Sería una manera muy descuidada de atender el problema en el peor momento. Se perdieron más de un millón de empleos por la contingencia sanitaria. ¿Ahora vamos a mandar a la calle a cuántos?”, apuntó.
Lezama explicó que, para combatir el outsourcing ilegal, la autoridad necesita actuar en forma de “pinza”, simultáneamente haciendo más restrictiva la legislación e incrementando los actos de fiscalización.
“Habría que hacer una revisión, primero de los preceptos legales en los que se apoyan estas empresas y por otro también de las inspecciones. Debe ser una pinza”, argumentó.
El empresario se dijo optimista al respecto, pues ni siquiera las propuestas legislativas más radicales que hasta el momento han emanado de los legisladores de Morena, el partido en el poder, de la pluma del senador Napoleón Gómez Urrutia, han planteado la desaparición tajante de la subcontratación laboral. Aunque, admitió, hay aspectos de su propuesta con las que no está de acuerdo, como el uso retroactivo de la ley.
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