Morena busca aumentar impuestos a ciertos productos chatarra, además de implementar el impuesto a la herencia; sin embargo, el presidente había prometido no subir los impuestos.
Luego de que Ricardo Monreal, líder de la bancada de Morena en el senado de la república anunciara el pasado domingo que buscaría en el próximo periodo de sesiones legislativas una reforma fiscal para mejorar la recaudación, el presidente Andrés Manuel López Obrador se pronunció en contra esta mañana.
Monreal planteó que ante el escenario de la crisis económica imprevista, provocada por la pandemia, habrá que realizar un viraje con relación al tema de los impuestos. Sin embargo, hay que recordar que una de las promesas de campaña del actual presidente fue que no habría aumento en ningún tipo de impuestos, o al menos durante los primeros tres años de su gobierno.
La propuesta, adelantó Ricardo Monreal a diversos medios, ya se encuentra en las manos de tres comisiones de la cámara alta, por lo que ya se están analizando la propuesta en la que se platea gravar las herencias, aumentar un 317% el impuesto al refresco y abrir una discusión sobre progresividad fiscal.
Sin embargo, hoy en la habitual conferencia de prensa matutina, el jefe del ejecutivo, al ser cuestionado por el Paquete Económico 2021, que se entregará el próximo 8 de septiembre, fue muy cauteloso, pero adelantó que “no va a aumentar la deuda […] no van a aumentar los impuestos”.
Con respecto a la propuesta de Morena que hay en el senado de gravar las herencias y y aumentar el impuesto a los refrescos, el presidente reiteró que no se deben de aumentar los impuestos en términos reales y explicó que de haber inflación “se va aumentar lo que es inflación, pero no hay un aumento en términos reales, no debe de haber aumentos.”
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