El IMCO considera que para incentivar la formalidad laboral, a cambio de sus impuestos, los ciudadanos deben obtener servicios públicos de calidad.
México necesita una reforma fiscal que reduzca el Impuesto sobre la Renta (ISR) del trabajo asalariado formal, que amplíe el catálogo de deducciones y que compense a los trabajadores por sus contribuciones. Esto último sería agregando valor a los servicios públicos de salud, créditos a la vivienda y pensión.
Investigación del IMCO
Lo anterior lo propuso el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) como parte del texto Cobrar impuestos para reducir la desigualdad: el rompecabezas de la política fiscal.
En el documento, sus autores analizaron cómo la estructura fiscal actual presenta graves deficiencias y describe el impacto negativo de la economía informal en los puestos de trabajo de los mexicanos. Lo que repercute en una pérdida de productividad y menor recaudación.
La investigación es uno de los textos que acompañan al Índice de Competitividad Internacional 2019, del IMCO, que fue presentado en noviembre.
El ISR es un impuesto alto para los trabajadores de menor ingreso
El ISR es un impuesto que pagan las personas físicas y morales. Sin embargo, al analizar el monto recaudado a trabajadores formales, los investigadores del IMCO notaron las siguientes características del ISR:
- Es un impuesto alto para los trabajadores de menor ingreso
- Recauda muy poco de los asalariados con menores ingresos y
- Desincentiva la formalidad laboral porque el costo de trámites y servicios es mayor al ingreso de la población con menos recursos
Medidas para incentivar el empleo formal
Sobre la formalidad laboral, el IMCO dice que se tiene que incentivar y aumentar para mitigar la desigualdad laboral y la exclusión social. Sin embargo, considera que para promover la economía formal es fundamental que los ciudadanos, a cambio de su pago de impuestos, obtengan servicios públicos de calidad y perciban un manejo adecuado de las finanzas públicas. Esto serviría como un incentivo para fomentar la formalidad de los empleos.
El estudio también expone lo que hizo Argentina para reducir la informalidad. El país sudamericano emprendió diversas acciones que le permitieron reducir la informalidad del 50%, en 2003, al 34% en 2014.
Una de las medidas más relevantes fue el fortalecimiento de la inspección del trabajo. El objetivo fue alcanzar mayores niveles de registro del trabajo laboral, detectar el trabajo no registrado y evitar la defraudación fiscal. Para lograr esos objetivos se aumentó la cantidad de inspectores de 40 a 400, quienes fiscalizaron a 1.1 millones de trabajadores de 370 mil empresas. Con ello se regularizó a un tercio de los trabajadores informales.
Corregir la baja y mala recaudación es uno de los pendientes en la política fiscal
De acuerdo con el estudio, corregir la baja y mala recaudación es uno de los grandes temas pendientes en la política fiscal. En teoría, recaudar más y mejor implicaría una mayor redistribución de ingresos que, a su vez, ayudarían a reducir la desigualdad.
El IMCO considera que una manera de lograrlo es aumentar el padrón de contribuyentes mediante esfuerzos para aumentar el número de trabajadores en la economía formal. Como complemento, se debe reducir la defraudación fiscal por parte de las actividades económicas que consiguen facturas apócrifas a fin de reducir el pago de impuestos. Al respecto, el estudio dice que combatir las malas prácticas debe ser una prioridad para la actual administración federal.
“De lograrlo, aumentarán los ingresos gubernamentales y, por ende, el gasto público para mejorar la calidad de los servicios de la seguridad social en beneficio de los trabajadores mexicanos”, indica el texto del IMCO.
Puedes revisar el Índice de Competitividad Internacional 2019 aquí / Fecha de publicación: 26 de noviembre de 2019.
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