Con la cancelación de créditos las empresas mueren fiscalmente, algo que no sucede con las condonaciones o perdones de deuda.
En mayo de 2019, Juan Manuel “El Mono” Muñoz Luévano se declaró culpable de lavado de dinero y distribución de cocaína. Esto sucedió en una corte de Texas, Estados Unidos. Muñoz Luévano también fue identificado como operador financiero de la organización criminal Los Zetas.
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) canceló un adeudo de 92 millones de pesos (MDP) a una empresa del operador de Los Zetas en agosto. Este hecho se hizo público en octubre y fue interpretado incorrectamente como si la autoridad fiscal le hubiera perdonado una deuda millonaria a Muñoz Luévano.
Sin embargo, el SAT aclaró que la cancelación de impuestos no es lo mismo que la condonación. La autoridad fiscal explicó que la cancelación de créditos fiscales es una baja contable que se da por la incosteabilidad en el cobro o por la insolvencia del deudor, y no lo libera del pago.
El SAT también indicó que la cancelación de créditos se realiza con el afán de hacer un ejercicio similar al de la limpieza de cartera vencida que realizan los bancos. Esto para que la autoridad se concentre en los casos que sí se pueden cobrar.
La cancelación de créditos NO es una cancelación de deuda, no libera de la obligación de pago. Los créditos se reactivan una vez que se detecten bienes con los que se pueda cobrar: https://t.co/vlZBApHYKQ
— SATMX (@SATMX) October 22, 2019
¿Qué es la cancelación de créditos fiscales?
El Código Fiscal de la Federación (CFF) establece que la Secretaría de Hacienda podrá cancelar créditos fiscales en las cuentas públicas, por incosteabilidad en el cobro o por insolvencia del deudor o de los responsables solidarios. [CFF 146-A].
El CFF indica que se consideran créditos de cobro incosteable los siguientes:
- Los que tengan un importe inferior o igual al equivalente en moneda nacional a 200 unidades de inversión (UDIS)
- Aquéllos cuyo importe sea inferior o igual al equivalente en moneda nacional a 20 mil unidades de inversión y cuyo costo de recuperación rebase el 75% del importe del crédito y
- Cuando el costo de recuperación sea igual o mayor a su importe
Mientras que los deudores se consideran insolventes en los siguientes casos:
- Si no tienen bienes embargables para cubrir el crédito o éstos ya se hubieran embargado
- En caso de que no se puedan localizar
- Cuando hubieran fallecido sin dejar bienes que puedan ser objeto del procedimiento administrativo de ejecución
El mismo CFF señala que la cancelación de los créditos no libera al deudor de su pago.
La cancelación de créditos no es una condonación o perdón de deuda
De acuerdo con Héctor Vázquez Luna, titular de la Administración General de Recaudación del SAT, la cancelación de créditos de ninguna manera es un perdón de deuda.
En la conferencia de prensa matutina del 22 de octubre, el funcionario explicó que la condonación extingue el adeudo fiscal, libera de pago al deudor y la empresa sigue funcionando. Mientras que en el caso de la cancelación del crédito, la empresa muere porque se le impide facturar.
La cancelación de créditos, agregó Vázquez Luna, no libera de la obligación de pago al deudor. Esto se debe a que en el momento en que la autoridad fiscal localiza bienes, reactiva el adeudo y lo cobra.
“Muchas veces tenemos información posterior a la cancelación, de inmuebles o vehículos, y procedemos a reactivar el adeudo y a cobrarlo”, expuso el titular de la Administración General de Recaudación del SAT. Te presentamos otros detalles interesantes que compartió el funcionario:
¿Cuáles son los efectos de la cancelación?
Después de que el SAT analiza toda la información con la que cuenta y la de otras fuentes externas de bienes, realiza la cancelación del crédito, envía los datos de la empresa deudora al Buró de Crédito y le cancela los sellos digitales.
Una empresa con la cancelación de un crédito prácticamente queda muerta fiscalmente, porque no puede emitir facturas, no puede operar y no tiene bienes.
Además, la investigación continúa, pero en lapsos de tiempo más prolongados, de alrededor de tres meses, para ver si se pueden localizar más bienes para cobrar la deuda.
¿Qué pasa con los socios o accionistas de las empresas?
Si los socios o accionistas de las empresas se ubican en los supuestos de ser responsables solidarios, la autoridad puede irse contra los bienes de estas personas físicas, pero la ley establece que primero tienen que ir sobre el patrimonio de las empresas.
¿Por qué se realiza la cancelación de créditos fiscales?
La cancelación de créditos fiscales se realiza en principio para depurar la cartera. Después de la etapa de investigación, el proceso puede culminar de las siguientes maneras:
- Con el cobro parcial o total,
- o con la baja contable o cancelación, que es la separación en una subcuenta
“Desafortunadamente, de toda esta cartera antigua que se viene arrastrando solamente es recuperable un cinco%. Por eso también es necesario depurarla, porque no podemos tener una cartera inmanejable… Más de millón y medio de adeudos no es manejable con el personal y todos los elementos que tenemos”, señaló Vázquez Luna, titular de la Administración General de Recaudación del SAT.
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