Carlos Urzúa quería subir impuestos; AMLO se negó
El ex secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, abundó en los motivos que lo llevaron a renunciar en una entrevista con la revista Proceso.
El martes 9 de julio Carlos Urzúa renunció sorpresivamente a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). A través de su cuenta de Twitter, el ex funcionario publicó una dura carta en la que criticó al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
Los señalamientos de Carlos Urzúa
Carlos Urzúa acusó al gobierno de AMLO de dos cosas:
- de tomar decisiones de política pública sin atenerse a las evidencias,
- y que personajes influyentes en el gobierno y con conflicto de interés impusieran funcionarios sin experiencia en la hacienda pública.
Con base en lo reportado en diversos medios de comunicación, los señalamientos de la misiva parecían apuntar a Alfonso Romo, jefe de la Oficina de la Presidencia. Estos funcionarios, conjeturábamos, podían ser Eugenio Nájera, quien fue nombrado al frente de Nacional Financiera, y Margarita Ríos-Farjat, la jefa del SAT. De hecho, la Ley del Servicio de Administración Tributaria tuvo que ser modificada para que la contadora neoleonesa pudiera estar al frente del órgano recaudador. Era requisito que el titular de la dependencia hubiera desempeñado cargos de alto nivel decisorio cuyo ejercicio requiera conocimientos y experiencia en materia fiscal y aduanera.
En su conferencia mañanera del miércoles 10 de junio, el presidente confirmó que Carlos Urzúa tenía diferencias con Alfonso Romo y Ríos-Farjat. Sin embargo, la jefa del SAT minimizó estas diferencias. Aseguró que meramente se trataba de diferencias “de estilo”.
Urzúa vuelve al ataque
En la edición de la revista Proceso (número 2228), el ex secretario abundó sobre las diferencias que tuvo con el gobierno. Urzúa tocó temas nuevos, como que le preocupaba que AMLO fuera fiscalmente conservador y simultáneamente se enfocara en los programas sociales. El presidente se negó a subir impuestos, a pesar de las dificultades que implicaría para el balance presupuestario.
“Él (AMLO) no quería hacerlo. Esa ha sido una diferencia importante entre nosotros. El presidente no quiere hacer una reforma fiscal. Yo sí, porque creo que es la única manera de abatir desigualdades. No sé por qué no quiere hacerlo. Quizás por no enfrentarse con algunos empresarios, quizás por el costo electoral… Siempre le comenté, sin embargo, que a medio camino del gobierno iba a ser necesario hacer una reforma y le expliqué mis razones”, dijo el ex secretario.
Confirmó que, en efecto, el funcionario que podría tener un conflicto de interés era Alfonso Romo. Éste, dijo, nombró a los titulares del SAT y la banca de desarrollo.
Respecto al primer punto de su carta, Carlos Urzúa manifestó estar en contra decisiones como la cancelación del aeropuerto de Texcoco. Otros diferendos son el énfasis presupuestario puesto en proyectos como Santa Lucía y el Tren Maya, que ni siquiera han empezado.
“¿Para qué poner tanto dinero ahí cuando podría utilizarse para carreteras y otras cosas?”, se pregunta.
Además, dijo, una de las decisiones que más lo exasperaron fue la reciente impugnación de los contratos de los gasoductos de la CFE. Las implicaciones podrían llegar hasta a dificultar la aprobación del T-MEC, pues Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de los Representantes de los Estados Unidos, está en el consejo de una de las empresas afectadas.
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