Sin crear nuevos impuestos ni incrementar las tasas de los ya existentes, el diputado plantea mejorar la cobranza de los impuestos permitidos por la estructura tributaria vigente.
La reforma fiscal que entró en vigor en 2014, incrementó los ingresos tributarios del gobierno federal de una manera notable: el primer año del gobierno de Enrique Peña Nieto, los ingresos tributarios fueron de 1.5 billones de pesos, mientras que en 2018 fueron de más de 3 billones de pesos.
Sin embargo, esta reforma fiscal parece ya haber dado todo lo que podía dar. De acuerdo a estimaciones de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en los Criterios Generales de Política Económica (CGPE) 2019, los ingresos tributarios como porcentaje del producto interno bruto (PIB) de 2019 a 2024 serán del 13.2%. Es decir, no crecerán prácticamente nada, salvo inercialmente, por lo que el crecimiento de la propia economía permita.
Aunado a esto, ante la baja en las perspectivas de crecimiento económico para 2019 y 2020, en los Precriterios Generales de Política Económica (PGPE) 2020 se revisó a la baja las expectativas recaudatorias. Así, el gobierno federal se encuentra en la apretada situación de tener que incrementar los ingresos tributarios en un escenario de desaceleración económica, a la vez que guardando la promesa de no subir impuestos ni crear nuevos.
La propuesta del presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, el diputado Alfonso Ramírez Cuéllar, consiste en implementar una nueva reforma fiscal, misma que espera sea aprobada en septiembre de este año, con la que espera que en 2020 se pueda conseguir un incremento de la recaudación como porcentaje del PIB de dos puntos porcentuales.
“Hay una debilidad estructural muy fuerte en los estados y los municipios. También hay nuevos mercados que deben ser regulados, como el comercio digital. Seguimos teniendo un boquete financiero enorme con la facturación falsa. La decisión no es aumentar impuestos ni aumentar tazas ni aumentar absolutamente nada, sino simplemente garantizar la cobranza de lo que en estos momentos permite la estructura tributaria”, dijo Ramírez Cuéllar en entrevista con El Contribuyente.
Otras de las medidas que propone el legislador es incrementar el impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS) a productos como bebidas azucaradas, tabaco, comida chatarra y alcohol.
Hace unas semanas, el subsecretario de Hacienda, Arturo herrera, propuso cobrar la tenencia y el predial en todo el país para mejorar las finanzas públicas. Sin embargo, el presidente, Andrés Manuel López Obrador, lo desmintió al día siguiente, argumentando que durante su gobierno no incrementarían los impuestos ni se crearían nuevos. No obstante, Ramírez Cuéllar retomó la propuesta pocos días después.
“Coincidimos con el presidente. No habrá aumento de tasas ni creación de nuevos impuestos. Creo que lo más importante es homogeneizar para fortalecer las finanzas municipales y estatales”, explicó.
Al preguntársele si la iniciativa había encontrado resistencias por parte del ejecutivo federal, el legislador respondió lo siguiente:
“Estamos analizándolo también con él, con el propio secretario de Hacienda, para ver cuál sería el desenlace que tendría esta propuesta”, respondió.
El legislador también mencionó que están analizando una reforma a la Ley de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, con el propósito de eficientizar el gasto. Subrayó otras medidas, como la iniciativa de la Ley de Austeridad, cuya minuta ya fue turnada al senado.
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