Esto fue lo que nos respondió el Servicio de Administración Tributaria.
A pocos les gusta pagar impuestos, más si consideramos que la percepción sobre el desempeño del gobierno es tan mala. Según el Índice de Percepción de la Corrupción, que realiza la organización no gubernamental Transparencia Internacional, los mexicanos ven con alarma la corrupción de las instituciones públicas (el 79 por ciento piensa que es un problema serio) y consideran que el gobierno actual no ha tomado medidas para solucionar el problema (56 por ciento).
No es de extrañar entonces que para muchos contribuyentes sea una experiencia intimidante acudir a las oficinas del SAT y, por ende, quieran hacerlo asistidos de un especialista que los guíe en los trámites que se requiera hacer ante la institución fiscal, como su contador o abogado de confianza. Sin embargo, el SAT en muchas ocasiones no deja que los pagadores de impuestos entren a sus oficinas acompañados de sus contadores, como pudimos constatar por los relatos de algunos de ellos en grupos especializados en Facebook.
Algunos contadores en redes sociales especularon que la razón de esto es que el SAT espera que los contribuyentes dejen de solicitar sus servicios. Otros piensan que la autoridad fiscal lo hace “para darse cuenta de si dicen la verdad o son prestanombres”.
Para arrojar luz sobre el asunto le solicitamos una entrevista al SAT, esperando que pudieran aclararlos el motivo. La autoridad fiscal no nos concedió la entrevista, aunque en un correo nos respondió lo siguiente:
“El Código Fiscal de la Federación señala que en ningún trámite administrativo se admitirá la gestión de negocios, es decir, los trámites deben realizarse personalmente por los contribuyentes o bien, salvo en casos especiales, a través de su representante legal, con el documento notarial que lo acredite como tal y no por un gestor”.
Sin embargo, esto no responde la pregunta, pues los contadores o abogados no acuden con sus clientes para hacer los trámites en su nombre, sino para asesorarlos en lo que se ofrezca. También solicitamos una entrevista con la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon), misma que hasta la fecha no se nos ha concedido.
Por su parte, Alfredo Efrén García Alcántara, integrante de la Comisión Fiscal Sur del Colegio de Contadores Públicos de México, nos refirió que en su práctica profesional ha experimentado este problema en las oficinas del SAT Oriente y en la del SAT Tlalnepantla. El motivo que a él le refirieron cuando le impidieron el acceso fue la falta de espacio. Incluso señaló que en una ocasión, cuando su cliente insistió en que se le permitiera pasar, percibió que el trato de la autoridad fiscal fue deficiente. “Parecía que estaban retrasando innecesariamente el trámite”, dijo.
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