No sufras (de más) la cuesta de enero
Aplícate para que éste no sea otro año nuevo lleno de deudas nuevas.
2018 comienza y seguro tienes un montón de propósitos como ir al gimnasio o viajar, pero tememos decirte que sin recursos es poco probable que lo logres. No trates de mentir, sabemos que, como cada año, te acabaste el aguinaldo y todo ese dinero “extra” en regalos, fiestas y otros detallitos. Cuesta de enero, la llaman.
Es cierto que el fin de año nos gusta para hacer reparaciones en la casa, consentir a nuestra familia y comprarnos ropa y otras chucherías; en el mejor de los casos, te habrás gastado todos tus ahorros… ¿y en el peor? Estás hasta el cuello de deudas. Y por si fuera poco, algunos precios aumentaron durante el inicio del año.
La solución no es dejar de consumir gasolina y tortillas
No existe una fórmula maestra para superar la cuesta de enero, y si la hay, no la tenemos.
Si no respetaste tus presupuestos o nunca hiciste uno, es tarde para arrepentirse. Pero no vamos a regañarte, te diremos cómo salir de ésta con la frente en alto y el bolsillo, no contento, pero tampoco triste.
Lo primero que debes hacer es un presupuesto (ahora sí) y respetarlo; no gastar más de lo que tienes parece obvio, pero se nos olvida fácilmente. Es importante también ser consciente de la situación en que te encuentras y hacérselo saber a las personas con quienes compartes gastos, así pueden idear un plan conjunto, ya que seguramente, todos atraviesan por algo similar.
Si alguien te debe dinero, es el momento de cobrarlo, claro, respetando los términos y plazos en que se hizo el préstamo. Pero el truco infalible es “apretarse el cinturón”, que no significa vivir a pan y agua, pero puedes prescindir (al menos por unos meses) de algunas compras o servicios que no son indispensables.
Ya si de plano no puedes y necesitas pedir un préstamo para saldar tus otras deudas, hazlo con responsabilidad: compara y negocia las tasas de interés en los diferentes lugares que consideres (no necesariamente debe ser un banco, puedes tener otras opciones, como casas de empeño).
Y para el final de 2018, recuerda cómo lo sufriste al inicio, a ver si así te gobiernas.
*Con información de C.P.C. Roberto Andrade Delgado, integrante de la Comisión de Finanzas y Sistema Financiero – Sur del Colegio de Contadores Públicos de México.
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