La llegada de los medios digitales cambió las reglas del juego, con el marketing no es una excepción.
Con el marketing tradicional los empresarios persiguen agresivamente a sus potenciales clientes para convencerlos de comprar su producto o servicio. Esta manera de entender las cosas se conoce como outbound marketing, estrategias que buscan empujar a que los consumidores hagan una compra. La llegada de los medios digitales cambiaron las reglas del juego, con el marketing no es una excepción.
Por el contrario, el inbound marketing consiste en técnicas que más que empujar a los clientes, buscan atraerlos de forma natural. Mientras que las vías tradicionales comprarían espacios publicitarios en la televisión o las calles, este nuevo marketing busca atraer mediante la creación de contenidos que puedan ser de interés para los clientes potenciales, con lo que estos posteriormente podrían compartir este contenido, dejar sus datos en tu página de internet e, incluso, volverse verdaderos embajadores de tu marca.
Un modo de hacer esto es crear contenido valioso para tu audiencia objetivo y dejar que ellos mismos lo difundan. Si tu empresa se dedica a la comercialización de cacerolas, por ejemplo, puedes escribir un blog donde compartas gratuitamente por redes sociales recetas de cocina. De esta forma puedes hacer que tu marca tenga un mayor alcance, que sean cada vez más personas las que la conozcan y la asocien a un recuerdo positivo. Todo el mundo necesita comer, ¿cierto?
Si bien tú mismo puedes hacerte cargo de la creación y difusión de este contenido, esto no es una regla. Algunas empresas contratan agencias de relaciones públicas que se dedican a crear contenido relacionado con tu producto que, idealmente, cumpla con las exigencias editoriales de medios de comunicación de terceros, con lo que puedes dar a conocer tu empresa sin necesidad de hacer una inversión tan fuerte como con el outbound marketing.
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