Un 21% de los trabajadores está en busca de un mejor trabajo que no necesariamente implica más dinero.
Según una investigación de Morgan Hunter, 21% de los trabajadores está en busca de un nuevo (y mejor) trabajo en este momento. Sí, eso podría incluir a Marianita, a quien haces quedarse horas extra sin paga, y a Juan, a quien haces trabajar dos fines de semana al mes. ¿Qué? ¿No quieres que renuncien? Bueno, entonces presta atención a la siguiente lista.
1) No los sobrecargues
Que alguien sea el mejor en lo que hace no te da permiso a darle una carga excesiva. Si lo haces, sólo conseguirás que se sienta poco valorado y eventualmente baje su rendimiento (o simplemente renuncie).
2) Respeta las horas personales
Encontrar un balance adecuado entre la vida personal y la laboral es una de las principales preocupaciones de los trabajadores. Planea las actividades que vas a realizar en horas de trabajo.
3) No seas tan controlador
En ocasiones, lo mejor que podrías hacer como jefe es contratar a alguien que sepa a la perfección lo que tiene que hacer y luego… desaparecer. Si todo el tiempo estás controlando lo que hacen y cómo lo hacen, podrían empezar a sentirse poco valorados.
4) Da sentido a lo que hacen
Es importante para cualquier persona conocer la importancia del trabajo que está realizando. Felicita a tus trabajadores cuando hayan hecho algo sobresaliente, hazles saber por qué su labor es importante en el engranado de la empresa.
5) No hay oportunidades de crecimiento
Una de las razones por las que cualquiera puede empezar a buscar nuevos horizontes, es porque ve truncadas sus oportunidades de crecimiento. Esto puede, sin embargo, ser un espejismo. Posiblemente esas oportunidades existen, pero no lo saben. De haberlas, comunícaselos.
6) No entres en chismes
Los chismes pueden llegar a ser entretenidísimos, pero tus trabajadores, antes que tus amigos, son tus empleados. Para mantener la imparcialidad debida, lo mejor es que te mantengas al margen.
7) No pueden “autorrealizarse”
Independientemente del puesto que ocupen, tus empleados tienen sueños y aspiraciones al margen del trabajo. Estos no tienen por qué estar peleados con sus funciones laborales.
8) Sé empático
Tus trabajadores, sobra decirlo, son personas. Intenta ponerte en sus zapatos para saber cómo se sienten y, de ser necesario, ayudarlos a estar mejor.