El cambio que el Inegi aplicó en la medición de la pobreza es grave, denuncian especialistas
Con la modificación, se da una disminución automática de la desigualdad entre los más ricos y los más pobres.
Las modificaciones que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) aplicó en su encuesta sobre el ingreso de los hogares, el año pasado, imposibilita al Consejo Nacional de Evaluación de la Política Social (Coneval) el realizar un cálculo de la pobreza que sea comparable con su evolución y es un tema grave, afirmaron hoy especialistas del Centro de Estudios Espinosa Yglesias.
“La gravedad del asunto no es menor: en los Lineamientos y Criterios Generales para la Definición, Identificación y Medición de la Pobreza, de observancia obligatoria para las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal, se señala que el Coneval debe realizar mediciones de pobreza comparables en el tiempo a partir de la información que proporcione el Inegi”, señaló el centro en un comunicado.
Con las nuevas modificaciones, se da una disminución automática de la desigualdad entre los más ricos y los más pobres del país y se imposibilita hacer una comparación de la evolución de la pobreza con años anteriores.
El pasado 15 de julio Inegi presentó los resultados de la encuesta sobre Ingreso Trimestral Promedio del Hogar del Módulo de Condiciones Socioeconómicas 2015 (MCS 2015), pero informó que debido a una nueva metodología usada en el levantamiento, los datos no son comparables con las MCS históricos.
El primero en reclamar por esta modificación fue Gonzalo Hernández Licona, secretario ejecutivo del Coneval, porque la institución que preside usa los datos de Inegi para estimar la evolución en la pobreza en México.
De hecho, si se hiciera la comparación entre los datos que el Inegi presentó el viernes pasado y los de un año antes, se concluiría que los ingresos de los más pobres crecieron 33%, un dato erróneo.
El Inegi argumentó que el cambio en la medición de los ingresos de los hogares era necesario para conocer mejor la renta de los mexicanos.
Coneval, además reclama que a pesar del acuerdo de colaboración que existe entre ambas instituciones, el cambio no fue consensado y ni siquiera le avisaron en el momento en que se realizó la encuesta.
“Cualquier modificación para captar adecuadamente variables económicas y sociales debe ser realizada con transparencia y planeación, permitiendo generar certidumbre a los usuarios. Ese no fue el proceso que siguió Inegi en esta ocasión”, señaló el Coneval en un comunicado.
Por ello, el CEEY llamó a que Inegi aplique el antiguo procedimiento en la próxima MCS de 2016 y comience un proceso de consulta y estudio para que se hagan las modificaciones adecuadas y que permitan la comparación con las de años anteriores a partir de 2018.
El centro de estudios añadió que se debe consensuar la nueva medición con expertos y el propio Coneval además de que deberá garantizar “la comparabilidad hacia atrás, aunque ello signifique levantar dos veces la misma encuesta y así tener un punto de conexión entre ambas series. Ello permitiría establecer con mayor precisión la trayectoria de la pobreza a través de decenios”.
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