La falta de pago y de nuevos contratos, además de la reestructuración de la antigua paraestatal están llevando a la industria a la quiebra; proponen trabajar para incorporarlas a otros mercados.
La falta de pago por parte de Petróleos Mexicanos, la falta de contratos por los bajos precios del crudo y la reestructuración derivada de la reforma energética están provocando el “deceso” de empresas en zonas como Ciudad del Carmen, Tabasco, y Poza Rica, Veracruz, informó la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra).
Aunque no se tienen contabilizadas cuántas empresas que participan en el proceso de producción han sido afectadas en estas regiones, la Canacintra aseguró que está trabajando para que se incorporen a otros mercados para sobrevivir.
Sin embargo, “la reconversión no se da de la noche a la mañana”, advirtió Enoch Castellanos, de la Comisión de enlace de la Cámara.
“Hay peligro en que esta mortalidad de empresas se extienda y luego nos hagan falta, y ese gran beneficio que daba la reforma energética como una palanca para reindustrializar el país se quede corto, porque van a tener que echar mano de empresas extranjeras dado que las nacionales tienen problema para financiarse”, afirmó.
Explicó que de los proveedores y contratistas afectados por los adeudos de Pemex, 500 están afiliadas a Canacintra, el resto están registrados con otros organismos como la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (Concamin) o en el Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Castellanos detalló que los servicios que Pemex debe van desde mantenimiento, limpieza, medición de espesor, así como productos como empaques, tuberías, válvulas, recipientes y tanques.
Respecto al convenio que firmó Hacienda y Pemex para que Nacional Financiera diera factoraje de 5% por 6 meses y ampliara los contratos que tenían de 120 días a 180, “es una paliativo para las empresas del sector”, sostuvo Castellanos.
Además, expresó, “nos hubiera gustado que el gobierno y la empresa asumieran ese costo, no el proveedor”.
Castellanos prevé que el recorte de 100 mil millones de pesos en Pemex va a imposibilitar la exploración de pozos, el mantenimiento y la actualización tecnológica que permite aumentar la eficiencia.
Sin embargo, espera “que no se le deje de dar mantenimiento a la infraestructura actual, porque eso puede implicar riesgos a la seguridad, al medio ambiente y al personal”.
Exigen el pago en estados
En tanto, Enrique Guillén, presidente electo de Canacintra, informó que en todas las regiones se está haciendo un diagnóstico para saber cuánto se les deben a los proveedores de los estados, ya que les preocupa que los pasivos no estén registrados como deuda pública y esto facilite la elusión del pago.
“Si no se tiene documentada, si no es aceptada no se les paga porque las administraciones que vienen no se hacen responsables”, dijo.
Castellanos observa que este es un problema sistémico, debido a que los estados no están generando recursos propios, la falta de transparencia y de evaluación de la aplicación de los recursos.
Sin embargo, destacó, “Veracruz es el peor caso”. Por eso urgió a que se les pague a las empresas veracruzanas que le venden al gobierno.
“Si ellos son las autoridades que deben, de una u otra manera, de estar en el escrutinio público para que se cumpla el estado de derecho y ellos incumplen entonces es lamentable”, afirmó.