El consumo promedio de bebidas azucaradas disminuyó 6.1% en 2014 como consecuencia del impuesto de 1 peso por litro. En las familias de menores ingresos la disminución fue de 9%.
El consumo de bebidas azucaradas disminuyó en un año 6.1% como consecuencia de la entrada en vigor del impuesto de 1 peso por litro, propuesto en la reforma fiscal de 2013, de acuerdo con un artículo publicado en la revista científica British Medical Journal.
La revista británica dio a conocer el estudio que dio seguimiento a 5,657 familias mexicanas a lo largo de 2014 y monitoreó su consumo de bebidas gravadas con el impuesto (azucaradas) y exentas (refrescos de dieta y agua embotellada).
La investigación encontró una disminución promedio del 6.1% en todo el año, y que llegó a ser de 11.9% en diciembre, comparada con el consumo proyectado en caso de no cobrarse el gravamen.
Se registró un aumento de casi 4% promedio anual en el consumo esperado de bebidas no azucaradas, que llegó a 7.5% en enero, pero fue de sólo 0.5% en diciembre.
”La compra de bebidas sin impuesto aumentó 4% (36 ml per cápita por día) sobre lo proyectado, principalmente derivado de la compra de agua embotellada”, informa el estudio llevado a cabo en conjunto por el Instituto Nacional de Salud Pública y el Carolina Population Center.
Añade que el consumo de bebidas que no pagan el impuesto, puede estar subestimado, ya que los hogares pudieron incrementar su consumo de bebidas que no se venden en tiendas, como el agua de la llave y el agua de fruta preparada en casa.
El estudio reveló que los hogares con menores recursos tuvieron una disminución en su consumo mayor al promedio, pues a lo largo de 2014, este cayó 9%, llegando hasta 17% en el último mes del año.
"El consumo de bebidas azucaradas genera claros daños a la salud, lo que en el caso de la población de los estratos socioeconómicos más bajos provoca mayores costos de atención en salud, disminución de la productividad y muertes prematuras, de ahí la importancia de implementar estrategias que logren reducir su consumo", opinó al respecto la investigadora en salud alimentaria, Fiorella Espinosa.
Alejandro Calvillo, director del El Poder del Consumidor (EPC) destacó la importancia de la publicación en una revista tan importante como la British Medical Journal, lo que dijo es garantía de calidad de la metodología y rigor de las investigaciones.
“Las políticas públicas que se diseñen e implementen en un país deben estar sustentadas con evidencia. Para ello, quienes las promueven y aplican, deben basar sus decisiones en los hallazgos de estudios con el suficiente rigor metodológico”, comentó.
El estudio concluye que incluso un impuesto relativamente pequeño (de aproximadamente 10% del valor de los refrescos en 2013) puede hacer una diferencia en la demanda de bebidas azucaradas.