La experiencia brasileña en el área de tributación ha tenido éxito en el uso de herramientas como el Whatsapp para tener un contacto ágil con la ciudadanía
Promover la emisión de facturas y mejorar la comunicación con los contribuyentes a través de la tecnología, es necesario para incrementar la recaudación e integrar a más personas a la formalidad, afirmaron expertos fiscales durante el Foro Internacional de Tribulación.
En Brasil desde algunos años se implementó el domicilio tributario, mediante el cual el contribuyente accede a los servicios de la página con su certificado digital, informó
Newton Oller, inspector fiscal de la Secretaría de Hacienda de Sao Paulo, Brasil.
“Toda notificación de información, de recaudación, es hecha por este canal. Es obligatorio que el contribuyente esté empadronado en este sistema”, dijo.
El funcionario explicó que no es necesario acudir a una oficina de contribuyentes para hacer una notificación o empezar una auditoría, ya que es posible enviarla a través de este buzón electrónico.
Esto no se hace mediante correos electrónicos convencionales, debido a que no hay garantía de que el mensaje sea leído ni del secreto fiscal, porque el mensaje pasa por los diversos proveedores de internet.
“No son notificaciones por correo electrónico, sino una caja postal” que sólo está relacionada a una cuenta de correo para informar al contribuyente que le llegó un mensaje a su domicilio tributario.
Para mejorar el funcionamiento de las herramientas de fiscalización, Oller considera necesario el desarrollo y uso de aplicaciones móviles, como Whatsapp para que el contribuyente se comunique con la autoridad fiscal, ahorrando tiempo y dinero.
En España, el gobierno ha optado por el “desnudismo fiscal”, mediante el cual el contribuyente sólo tiene que acudir a complementar la información que tiene la autoridad, explicó Rufino de la Rosa, integrante del cuerpo superior de inspectores de finanzas de España.
“De 19 millones y medio de declaraciones, en 18 millones y medio los contribuyentes han accedido a ver qué información tenemos”, señaló.
De la Rosa observó que no es común que el contribuyente entre al portal o a las oficinas de la autoridad fiscal, por eso es fundamental facilitarle el trabajo con procesos más sencillos.
Roberto Márquez, vicepresidente de Asociación Mexicana de Provedores Autorizados de Certificación (Amexipac), aseguró que aunque en un inicio el uso de estas tecnologías es complicado para el contribuyente, a la larga hay un ahorro no sólo en dinero sino en tiempo y seguridad de la información.
En México, por ejemplo, ya se cuenta con un sistema mediante el cual podemos checar que la factura es válida, dijo.
Incentivar a los contribuyentes
Rufino de la Rosa consideró que para aumentar la recaudación no sólo es necesaria digitalización sino también involucrar al contribuyente en los procesos internos.
En el caso de las devoluciones en España, las personas físicas reciben una notificación por si quieren empezar el proceso de devolución de Impuesto Sobre la Renta antes de que la autoridad lo haga, argumentó.
Advirtió que tampoco se debe aplicar una norma para todos los contribuyentes ya que todos son diferentes.
Oller destacó que en el proceso de fiscalización es muy importante la participación del consumidor final, para lo cual en Brasil hay incentivos.
El consumidor pide su factura y desde que le cobran se entera que el comprobante llegó a la oficina tributaria, a través de su smartphone o tableta.
Con esta operación el consumidor puede vigilar que su factura fue enviada y, así, participar en los sorteos de dinero en efectivo que realizan las autoridades, explicó.
Oller indicó que para que más gente se integre a la formalidad es necesario tratar a estos contribuyentes de manera distinta y simplificar los procesos.
“Facilitar que estas pequeñas tiendas que no tienen una computadora puedan registrar sus ingresos y egresos mediante un smartphone y establecer una tribulación adecuada a su realidad”, mencionó.
También destacó la importancia de tener mayor educación fiscal, para que exista menos autoritarismo por parte del gobierno y el contribuyente sea más proactivo.